La universidad, en general, no está mal. Se encuentra un poco lejos de la ciudad de Sevilla, pero está muy bien comunicada con el metro. Las infraestructuras también están muy cuidadas, y sobre todo destacaría la calidad de la biblioteca y los numerosos espacios deportivos con los que cuenta el campus.
Al ser relativamente joven, aún les queda mejorar sobre todo los aspectos administrativos: matricularse o resolver “papeleo” puede resultar una auténtica pesadilla.
La universidad promueve mucho los programas de movilidad, y hay un gran número de estudiantes internacionales todos los años. En lo que respecta al profesorado, como en todos sitios hay de todo, pero por lo general son profesores jóvenes, hacen mucho uso de las TIC y realizan bastantes seminarios a lo largo del curso.
Normalmente, se la considera “el segundo plato” tras la Universidad de Sevilla, pero es una buena opción si se pretende estudiar un doble grado o una carrera bilingüe. También tiene muy buena fama en Ciencias del Deporte.